En Holanda: Estuve on los mejores jugadores mundiales del juego de Damas.

En  España: Otra vez estuve con los mejores del mundo, pero esta vez en plan profesional.

Aquí abajo está la prueba.

EL SECRETO SE LLAMA:     I N V E S T I G A C I Ó N   y trabajar duramente.

GENERACIÓN XXI          JULIÁN CASTILLO SÁNCHEZ
                                                QUÍMICO Y BIÓLOGO
                                                                                                                                                                               Periódico La Verdad, 1 de marzo de 2014, pág. 10 Región.

EI reciente académico de Medicina logra que su empresa, Nutrafur, sea la primera de España en la fabricación de extractos vegetales.



Para concertar la entrevista con Julián Castillo, el periodista llama por teléfono a Nutrafur, la empresa de la que es director de investigación y desarrollo, y le pasan directamente con su extensión. Sin más preguntas, ni filtros o parafernalia con los que tantas otras personas de menor enjundia tienen medio blindado su acceso. Ya en vivo y
en directo, el periodista entiende esa práctica de puertas y líneas abiertas: dos veces licenciado en Química (Orgánica e Industrial) doctorado en Biología y reciente académico correspondiente de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Murcia, Castillo Sánchez tiene el brillo de 1a sencillez y de la humildad, cualidades que multiplican geométricamente su valor si se tiene en cuenta que posee seis patentes y que la empresa en cuyo nacimiento fueron decisivos sus conocimientos e inquietudes científicas, hoy, 15 años después, es la primera de España y una de las dos primeras de Europa en fabricación y comercialización de extractos naturales de plantas.

Las cifras.
En su empresa se manipulan más de 3.000 toneladas de materias primas de distintas plantas y se fabrican más de 300 toneladas de productos destinados a los campos de alimentación, suplementos nutricionales, cosmética y farmacia. Más del 90% de sus clientes son empresas extranjeras (Nestlé, Bayer y un largo etcétera) a las que venden los ingredientes activos. En el apartado nutritivo se incluyen extractos para alimentación del ganado, una demanda creciente hasta el punto de que Castillo señala que «dentro de unos años venderemos más para animales que para personas».

En extractos de romero y olivo, y tal vez de cítricos, la empresa murciana cuya investigación dirige es la primera del mundo.



                                                            Prof. Dr. Julián Castillo Sánchez
                                                                 Foto: Nacho García / AGM

 
«Me gustaría que los políticos diesen forma real a su consabida frase de que hay que apostar por la Investigación y el desarrollo»

Entre frascos, pero no enfrascado.
Su tarea cotidiana, desde hace 30 años, se mueve en la manipulación microscópica de cientos de tarros con múltiples y diferentes contenidos. Pero vivir entre frascos no le hace estar enfrascado hasta el punto de olvidar lo más importante que, para él, no es sino su familia -«nunca le pagaré a Flory [su mujer] todo lo que ha hecho por mí y por nuestros hijos»- no en balde su esposa, que tiene dos títulos universitarios, sacrificó su carrera profesional para convertirse en el pilar sólido de un hogar enseñoreado por el amor.

La ‘escuela’ del Belluga.
Desde su Albacete natal, Julián Castillo llegó a Murcia para estudiar Química avalado por un expediente de Bachiller plagado de matrículas de honor. Pero fue en el antiguo Colegio Mayor Belluga, del que llegó a ser director cuando aún no había finalizado la carrera, donde realmente se ‘abrió’ a la vida. Allí descubrió que había otros mundos además de los libros de texto y, sobre todo, asimiló experiencias que le iniciaron en la relación humana, la cual compaginó con su ya natural enfoque de relacionar estructuras moleculares. La relación, la curiosidad, los ‘por qués’, actitudes inherentes a todo buen investigador. En aquellos años, primeros de la Transición, el Belluga era una especie de referencia cultural. Por allí pasaron Abril Martorell, Grisolia, Roca Junyent, Mayor Zaragoza y un largo y lustroso etcétera de personajes con los que Julián Castillo compartió mesa, mantel y, sobre todo, conversación.

Sus mentores
Si tiene clarísimo aquello de que los éxitos de una empresa, aunque él sea el director, se deben al grupo, más viva aún tiene la veta del agradecimiento en cuya lista ocupan los primeros lugares los exrectores Sabater y Lozano. Ellos le proporcionaron trabajo al poco de terminar la carrera, ellos le orientaron para que también hiciese Química Industrial y, al poco, para que cambiase de empresa (la actual Nutrafur) donde iba a encontrar, como halló, campo expedito para su creatividad, sustentada siempre por un cerebro labrado en la constancia y el afán de superación, según lo define la catedrática de Neuroanatomía Trinidad Herrero quien, al presentarlo como académico el reciente 5 de febrero, afirmó que «la doble faceta de empresario e investigador del Dr. Castillo conforman un currículum poco común, sobre todo por su afan de estar siempre preparado y seguir formándose cada día con voluntad férrea».

La relación Universidad-Industria
Admite Castillo que la colaboración entre la universidad y la industria aún es escasa, de lo cual se resiente la I+D+i. Pero al mismo tiempo se pregunta qué hacer para resolverlo. Los datos señalan inequívocamente que es necesario un mayor esfuerzo del sector privado, pero al mismo tiempo reclama que la industria necesita que la universidad (la investigación) debe descender con humildad y sensatez a conocer las necesidades reales de la industria. Y como dijo en su primer discurso como académico y repitió en la entrevista con el periodista, él exigiría una mayor implicación política:
«Me gustaría que se diese forma real a la repetida frase [por parte de los políticos] de que hay que apostar por la I+D».




ACOTACIONES.

Julián Castillo Sánchez (La Roda Albacete, 1960) considera que lo primero que tenemos que hacer los españoles es mirarnos el ombligo y trabajar, haciendo cada uno lo suyo, con el necesario esfuerzo, interés y responsabilidad. No le gusta en absoluto la actual politización de todos los ámbitos de la vida. «Es absurdo, parece que vivimos gracias y para la política que, en realidad, no debería ser más que un elemento de gestión social». Castillo habla profusamente («me llaman ‘Julián Castigo», dice con sentido del humor) pero con una muy apreciable clarividencia. No tiene tiempo de aburrirse: además del trabajo en su empresa, coordina 16 proyectos científicos, imparte clases en la Universidad (de máster y de doctorado) es autor de 7 capítulos de libros, 76 artículos científicos y sus trabajos han sido citados en más de 2.500 ocasiones por otros autores. En 2009 fue Premio de Investigación e Innovación y todo e1lo no le ha impedido practicar deporte (jugó a baloncesto con Iturriaga, Corbalán y otros famosos) música (conquistó a su mujer a base de cantarle serenatas con la Tuna del Belluga) y sus aspiraciones son tan hermosas como sencillas: «mantener la estabilidad y cariño en mi hogar, ver que mis hijos se abren paso en sus respectivas formaciones y, profesionalmente, seguir manteniendo una actividad que permite que un buen número de familias tenga trabajo».


Le gusta
«La humildad y es esfuerzo».

«Disfrutar con mi familia, Flory, Juan Pedro y Álvaro; el deporte (baloncesto y tenis); me gusta el cine, pero- confieso que me gusta la televisión; mi música favorita es la sudamericana, Los Panchos, María Dolores Pradera.... las zarzuelas y, cómo no, la Tuna; soy un amante pecaminoso de la buena mesa y disfruto como aprendiz de ‘cocinillas’. Hablando más en serio, aprecio la responsabilidad, la humildad, el interés y el esfuerzo, pilares básicos de todo investigador y, lo siento, me gusta mi trabajo».

Le disgusta
«La prepotencia y la vagancia».
«El término ‘disgustar’ se ciñe más a una valoración personal de lo que otros hacen y que en cierta medida nos influye. Nuestra idiosincrasia de españoles nos hace tener largas listas de cosas que nos disgustan, bien sea por nuestras ideas o por nuestras creencias. Aquí solo quiero ‘disgustarme’ por unas pocas cosas con las que convivimos a diario: la hipocresía, la necedad, la maldad ‘perse’ y, claro, por las actitudes opuestas a lo que busco: irresponsabilidad, prepotencia, desinterés y vagancia».




 
De izquierda a derecha:
Dr. Juan Lorente, Prof. Obdulio Benavente-Garcia, Sr.  D. Juan Lorente, Dr. Govert Westerveld, Prof. Julián Castillo, Prof. Dr. José Antonio Lozano Teruel.
(2009, Premio de Innovación Tecnológica para la prevención del Alzheimer -  Instituto de Fomento de la Región de Murcia (Info).